En el tercer trimestre de este año, el sistema portuario de
Amberes-Zeebrugge manejó alrededor de 65,4 millones de toneladas de
bienes, con un descenso del -7% respecto al mismo periodo de 2022. Único
Un flujo creciente de cargas era el de la
graneles secos por un total de 3,6 millones de toneladas
(+3%). Fuerte caída de la carga en contenedores
equivalente a 33,6 millones de toneladas (-7%). En el sector del material rodante, la
5,1 millones de toneladas (-2%) y
la de los productos convencionales, de unos 2,5 millones de toneladas
(-22%). Graneles líquidos, con 20,4 millones de toneladas,
marcó una disminución del -2%.
En los primeros nueve meses de 2023, el tráfico general es
ascendió a 204,4 millones de toneladas, lo que supone un descenso del -6%
en el período correspondiente del año pasado. En el segmento de
El tráfico de contenedores ascendió a 9,5 millones de TEUs
(-7%).
"La persistencia de los problemas económicos y geopolíticos
- comentó el director general de la Autoridad
Portuale, Jacques Vandermeiren - se puede ver en las figuras
desde hace varios trimestres. La competitividad de la industria
La Unión Europea está bajo presión debido a los altos costes
energía, materias primas y mano de obra
baja demanda global. Los indicadores, precisó, no
siguen sin mostrar ninguna mejora en el futuro previsible y en el
cuarto trimestre, el tráfico de contenedores seguirá siendo
afectados por la cancelación de viajes desde el Lejano Oriente.
A pesar de que nuestra productividad es
inferior a la media de la gama Hamburgo-Le Havre y que estamos
ganando cuota de mercado, tendremos que enfrentarnos al hecho de que la
2023 no será un año excepcional".